Ruta cinematrográfica. Conoce la Ruta de Jose Luis Cuerda: una Ruta de película.

"Amanece, que no es poco" es una de las más lúcidas y probablemente la más salvaje de las películas que ha rodado Cuerda, donde sus protagonistas así como los paisajes, forman parte de nuestra comunidad y han estado presentes en la vida de nuestros pueblos y en la personalidad de sus gentes.

El guión y la dirección de "Amanece, que no es poco" corren a cargo de José Luis Cuerda, artífice de todo este mundo, un hombre que sabe hacer cosas serias pero que cuando da rienda suelta a su imaginación es capaz de hacer genialidades como ésta. Ésta es una de esas rarezas que aparecen de vez en cuando y suelen calificarse como films de culto. Esto significa que son películas admiradas por una minoría y despreciadas por el resto, pero que normalmente no dejan a nadie indiferente, para bien o para mal.

Esta obra cinematográfica de Cuerda, es un soberbio ejemplo de humor surrealista, irreverente y absurdo, rozando a veces los límites de la corrección, pero considerada por muchos una de las diez mejores cintas del cine español; albaceteña, muy albaceteña.

Con motivo del XX aniversario del estreno de "Amanece, que no es poco", se ha puesto en marcha esta nueva ruta que trata de dar a conocer los escenarios y localizaciones reales de Albacete y la Sierra del Segura, donde fue rodada esta película de culto, que aún maravilla a jóvenes generaciones de aficionados al cine que todavía no eran espectadores cuando se estrenó.

Los paisajes, como los actores que colaboran en el rodaje, y otros elementos, son de esta tierra, la de Cuerda. Ayna, Liétor y Molinicos son los pueblos que han servido de escenarios, aportando toda su esencia, sus costumbres, los lugares de encuentro, las formas de vida. Parajes y pueblos que después de veinte años han sabido conservar su belleza y autenticidad, sin ningún deterioro. Y además mantienen un vínculo muy especial con José Luis Cuerda, desde su infancia, y que perdura inmutable en el tiempo, como su obra.

Ayna -  Ruta Cinematografica. Ruta de Jose Luis Cuerda

Ayna es conocida como la Suiza Manchega. Ayna deriva de ayn, vocablo árabe que significa fuente, en Ayna son más de doce las fuentes que podemos hallar, formando un auténtico manantial.

La Ermita de los Remedios, guarda en su interior un bonito artesonado mudéjar del siglo XVI, declarado de Interés Cultural. La Iglesia de Santa María de lo Alto guarda una imagen de la Patrona.

A 10 Km. de Ayna se encuentra la Cueva del Niño, que alberga las pinturas rupestres más antiguas de nuestra provincia.

En la Plaza Mayor, que tiene una curiosa pared escalonada con gradas, se ha abierto recientemente un museo etnográfico.

Liétor -  Ruta Cinematrográfica. Ruta de Jose Luis Cuerda.

Liétor es un hermoso enclave junto al río Mundo. Daremos un paseo por la Iglesia donde admiraremos imágenes de Salzillo, retablos de bronce y el Museo Parroquial, con piezas de gran valor arqueológico pertenecientes a un ajuar musulmán del s. X, sacro y etnológico.

Famosísimo es su ciclo de conciertos de órganos: protagonizados por tres órganos, uno realizado por Joseph Llopis en 1.787, y dos de nueva construcción, el del convento de las Carmelitas Descalzas y el de la Ermita de Belén. En el bajo del altar hallamos una cripta con diversas momias.

En la visita por el pueblo encontramos varias casas señoriales, como la de los Rodríguez de Escobar o la casa de los Tovarra.

Destacamos la Ermita de Belén, Monumento Histórico-Artístico de ámbito nacional, destaca por su decoración a base de murales de vivo colorido, considerándose la mejor colección de pintura popular del s. XVIII a nivel nacional.

Molinicos - Ruta Cinematográfica. Ruta de Jose Luis Cuerda.

Molinicos, o el llamado Corazón de la Sierra, consta de dos partes bien diferenciadas, una al norte, en la cuenca del Río Mundo y la otra al sur, en la cuenca del Río Segura.

Molinicos está situado en el discurrir y la confluencia del valle formado por dos arroyos, el arroyo del Pardal y el arroyo de Fuente-Higuera. Ello hace de su casco urbano un entramado de empinadas y estrechas calles.

Del período de dominación árabe quedan aun vestigios en las torres de vigilancia y los torreones del s. XII.

El antiguo Ayuntamiento se ha rehabilitado como Museo Micológico del Níscalo.